Cannabis legal en Canadá en 2025: una apuesta ganadora
Desde la legalización del cannabis recreativo en 2018, Canadá ha sido un precursor. Para 2025, su modelo...
Las costumbres están cambiando poco a poco, pero el CBD sigue teniendo mala prensa en el imaginario colectivo. Droga, adictivo, ilegal, peligroso, perjudicial para el cerebro... los conceptos erróneos están ahí para empañar la imagen del CBD, cada vez más popular.
Información verdadera o falsa... ¡no es lo que usted piensa!
A continuación te presentamos 7 ideas preconcebidas que puedes tener sobre el CBD, para que veas lo lejos que están los prejuicios de la realidad.
Si estás buscando al culpable número uno de los prejuicios que rodean al CBD (cannabidiol), ¡has llegado al lugar adecuado! El THC (tetrahidrocannabinol) es el compuesto comúnmente asociado al nombre "cannabis", y es el origen de muchas de las ideas preconcebidas que se atribuyen al CBD. De hecho, el THC es una molécula que no se lleva bien con nuestro organismo: efectos psicotrópicos, adicción muy fuerte, acción nociva sobre el cerebro, etc. Aunque los científicos están estudiando sus posibles beneficios y dosis, en general el THC ha tenido un impacto negativo sobre nuestra salud. Actualmente es ilegal cultivarlo y consumirlo en Francia.
Lo único que ha bastado para fortificar los prejuicios sobre el CBD es el origen común del CBD y el THC. De hecho, estos dos compuestos pertenecen a la gran familia de los cannabinoides. Algunas de estas sustancias químicas pueden extraerse de una planta en particular: el cáñamo(Cannabis sativa L). Por lo tanto, el CBD y el THC proceden del cáñamo, la misma fuente para dos compuestos muy diferentes.
El consumo de THC es actualmente ilegal en Francia. Sin embargo, el CBD no tiene nada que ver con el THC y se puede consumir legalmente en Francia.
La legislación fija el límite en un 0,2% de THC:
Así que presta atención a la procedencia de tus productos para poder consumir CBD sin miedo.
La sensación de colocón es consecuencia del efecto psicotrópico (psicoactivo) de un producto. El THC es psicoactivo, por lo que su consumo puede inducir una sensación de "colocón".
El CBD no es psicoactivo. Así que no hay riesgo de que tu realidad se vea alterada por consumir CBD.
Nota: los científicos están estudiando incluso la capacidad del CBD para contrarrestar los efectos psicoactivos del THC.
El temor es legítimo. Las adicciones, en el sentido más amplio del término, son hoy un problema sanitario de primer orden. Ya seas adicto a la nicotina, alalcohol, al THC o al azúcar, tu salud puede sufrir graves daños a largo plazo, y no es fácil salir de una adicción así.
La adicción al THC es una de las más fuertes que existen. Pero, ¡no te preocupes! No todos los compuestos derivados del cáñamo han heredado el mismo poder adictivo. El CBD no causa adicción, un hecho demostrado y anunciado oficialmente por la OMS (Organización Mundial de la Salud).
Nota: este compuesto está definitivamente lleno de sorpresas, ya que consumir CBD podría ayudar activamente en la lucha contra la adicción al THC, ¡todo un logro! En términos más generales, en la lucha contra la adicción, el CBD es un candidato muy prometedor.
También en este caso es difícil no establecer un paralelismo con el THC. El cerebro, uno de nuestros órganos más preciados, se ve especialmente atacado cuando una persona consume THC: fatiga, confusión, ansiedad, aumento del tiempo de reacción, paranoia, incluso delirios y alucinaciones. No es un cuadro agradable, más aún si se analiza a largo plazo.
Afortunadamente, el CBD no provoca ninguno de estos síntomas. De hecho, ocurre todo lo contrario. De hecho, además de ser un antioxidante, se dice que el CBD es neuroprotector: está lejos de dañar el cerebro porque, al contrario, el CBD protegerá nuestras neuronas y, por tanto, nuestro cerebro.
La ciencia también está estudiando los beneficios del CBD en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas (Parkinson, Alzheimer, etc.). Así que ya puedes ir tirando este concepto erróneo a la papelera.
He aquí la culminación de todo lo que está mal con el CBD. Clasificado en 2018 como sustancia segura por la OMS, el CBD es un producto muy bien tolerado por nuestro organismo (muy pocos efectos secundarios, ningún efecto negativo significativo sobre las funciones vitales o el sistema nervioso).
Podríamos detenernos ahí y decir que el CBD es un producto más, neutro para nuestra salud. De nuevo, esto no podría estar más lejos de la realidad. Los beneficios terapéuticos del CBD son numerosos y muy versátiles, lo que convierte a este producto natural en un cliente muy intrigante para la investigación científica: neuroprotector, antiinflamatorio, antiemético, ansiolítico, anticonvulsivo, etc. La lista de virtudes del CBD crece año tras año a medida que la ciencia se centra en su capacidad para tratar enfermedades en profundidad.
Así pues, el CBD no es peligroso para nuestra salud: ¡es un sólido aliado!
Para los que piensan que el CBD es un remedio de la abuela, dando a entender que su eficacia se basa simplemente en rumores y efectos placebo, ¡se equivocan!
De hecho, los beneficios terapéuticos del CBD son tomados muy en serio por la investigación científica, que se amplía cada vez más año tras año. Sí, el consumo de CBD forma parte de lo que se conoce como medicina "alternativa", pero eso no significa que los efectos reales de este compuesto natural, demostrados por la ciencia, sean ilegítimos.
Los investigadores también están animando a que se investigue más el uso del CBD para tratar una serie de dolencias (desde pequeños dolores cotidianos hasta enfermedades crónicas graves) con el fin de aumentar nuestros conocimientos sobre el tema.
Adictivo, ilegal, peligroso, alto, destructivo para nuestra salud, ... lo que sea , el CBD no es nada de eso. Estos prejuicios, que provienen directamente de su primo el THC, están reñidos con la realidad del CBD.
El CBD es un compuesto natural que se puede consumir legalmente en Francia. No produce colocón, no provoca adicción, no daña el cerebro (¡incluso lo protege!) y es un poderoso aliado para la salud. Esta información está avalada por la investigación científica y también por la OMS.
Así que puedes consumir CBD sin miedo: ¡seguro que te sorprende (para bien)! No dudes en hablar con tu médico.
Desde la legalización del cannabis recreativo en 2018, Canadá ha sido un precursor. Para 2025, su modelo...
El mundo de los cannabinoides sigue expandiéndose, con la aparición periódica de nuevas moléculas con diferentes perfiles...
Dejar de fumar cannabis no es un simple cambio de hábito. Es un proceso complejo que requiere tiempo y...